PARA EMPEZAR ¿QUÉ ES LA ARTROSIS?
La Artrosis consiste en una afección degenerativa de los huesos, con la pérdida gradual o total del cartílago articular, que afecta a ligamentos, tendones, meniscos, etc. El cartílago articular es un tejido duro, pero a la vez con cierta elasticidad y flexibilidad que permite el desplazamiento de los huesos entre sí, su función es la de amortiguar las fuerza y movimiento entre los huesos evitando que rocen entre sí, , lo que hace ayuda a disminuir o evitar el desgaste de la articulación. Las articulaciones son aquellas que permiten la flexión de distintas partes del cuerpo, tanto en extremidades como la espalda.
CAUSAS DE LA ARTROSIS
Por tanto, la artrosis se puede presentar en diferentes articulaciones del cuerpo, las más comunes: rodilla, cadera, en la zona lumbar o cervical. Las causas suelen ser diversas, como el sobrepeso, la falta de ejercicio, la edad, entre otros factores. Incluso se sabe que las mujeres suelen ser más propensas a ésta enfermedad. También se deriva de lesiones mecánicas, es decir, movimientos repetidos en periodos prolongados que sobrecarga las articulaciones, como por ejemplo, aquellos que se realizan en distintos oficios o incluso común también en deportistas.
SÍNTOMAS DE LA ARTROSIS
Al ser una enfermedad degenerativa, en sus inicios los síntomas pueden ser apenas perceptible y poco importante. Al principio el paciente refiere molestias en la articulación, durante su uso en una actividad determinada y continuada, tras cesarla y dar reposo a la misma, mejora o desaparece, pero en un estado más avanzado la dolencia es latente y requiere d menor esfuerzo físico para aparecer o incluso ser constante. El dolor articular suele ser mayor al iniciar una actividad o ejercicio, se nota mayor rigidez, pero conforme se repite, la articulación cede y el dolor mengua. En etapas avanzadas, es común percibir una disminución de movimiento en la articulación, lo que representa una serie de limitaciones para el paciente.
DIAGNÓSTICO DE LA ARTROSIS
Es bastante sencillo y se hace a través de los síntomas que la persona esté experimentando y de una exploración física que permite saber en qué grado de artrosis se encuentra el paciente. Los estudios radiológicos pueden determinar de una forma mucho más precisa la severidad de la artrosis y sirve para confirmar el diagnóstico. En casos más concretos el médico se tendrá que apoyar en pruebas como la resonancia magnética, entre otros.
IMPORTANCIA DE LA FISIOTERAPIA EN EL TRATAMIENTO
A pesar de que no existe una cura como tal capaz de sanar la artrosis, como vimos antes, existen medidas preventivas y si ya se padece, opciones fisioterapéuticas como masaje, electroterapia, estiramientos, así como potenciación selectiva y progresiva que mejoren la calidad de vida del paciente, igualmente para ayudar a retardar la propia evolución de la enfermedad y disminuir el dolor y las molestias. La artrosis cual no es una enfermedad de gravedad, pero sí que es recomendable dar un diagnóstico precoz para lograr mejores resultados y evitar el que sea necesaria una intervención quirúrgica.
Puede consultarnos si reconoce algunos de los síntomas relacionados con la artrosis y estaremos encantados de asesorarle sobre los tratamientos de fisioterapia en nuestras clínicas de Bilbao y Barakaldo.